En luna Llena me cambio
No hay plazo que no se cumpla ni fecha que no se llegue,
comenzando con esta consabida frase…o lugar común entre los literatos.
El viernes me cambio de casa, después de 20 años de vivir en
la actual. Nos despedimos con dignidad, mi casa actual se está renovando para
poder recibir a sus nuevos inquilinos, que afortunadamente serán una pareja de
amigos muy queridos, qué bueno que ellos la reestrenen, de allí en adelante
confío en que los sucesivos sean buenos inquilinos.
Mi casa nueva ya me espera, ahora estoy como partida a la mitad, todos mis
trastos ya están allá, y solo los muebles grandes están aquí. Mi jardín y mis
hijas-plantas ya emigraron y me esperan, era vital para mi que se fueran
primero, que se adaptaran a su nuevo espacio como seres vivos que son.
El otro día una amiga me dijo -Tu también necesitaras un
proceso de adaptación- y es cierto, aún a lo bueno, uno necesita
adaptarse…Creo que a lo malo no te adaptas solo aguantas hasta que dure.
Interesante perspectiva, como te modifica la psique un nuevo comienzo,
a razón de la nueva película “Gravity” de Cuarón, ayer escuché que lo mágico de
la película es que era una metáfora de cuando el hombre vence los obstáculos y
sale adelante… habrá que verla.
Igual cualquier cambio representa una aventura, un reto algo
que aprender.
Ayer me quede pensando: Tendré que acostumbrarme a dormir en
otro espacio, en otra orientación, a los caminos para llegar a mi nueva casa, a
que mi cuerpo pueda moverse en automático como
lo hago ahora, entre somnolencias dentro de ella, con o sin luz, al tipo de
agua, a la regadera… jaja a todo!
Además de toda la logística y detalles técnicos, que si el
Internet, que si el teléfono, que si la lavadora, que esto que lo otro, parte
de lo mismo.
Con veinte años menos, la cambiada anterior me hizo los
mandados, ahora el cuerpo aguanta menos, se cansa más rápido, aunque aún
estamos fuertes y con muchos bríos.
También hay más serenidad en los nuevos proyectos, el
entusiasmo vertiginoso de los “treintas” ha sido reemplazado por una ecuánime
serenidad y paz, ¡que bueno!
Doña Turbo-cargada (ósea yo) finalmente aprendió a aprecia
la calma de los días y la paz.
Como
pequeña introducción, hace un par de semanas ya tuve un primer altercado con
los vecinos nuevos… aunque no los ví, (la ventaja de ser coto y tener
administrador que toree las broncas), que la cerca no les gusto etc. En fin me
sirvió par darme cuenta que la humanidad continua igual donde
quiera que estés y que tratar con personas siempre será algo que aprender
y que manejar con cuidado.
El cambio empieza en mi, aún no los conozco, aún no me
conocen, es valida la desconfianza, la inquietud, amigos o solo vecinos, no lo
se ahora ni quiero pronosticar ni crear expectativas. Si espero vivir en un
clima de armonía y cordialidad ese es el objetivo. Habrá quien solo reciba un
saludo, seguramente habrá quien quiera crear una relación cordial o hasta amistosa,
ya veremos que sucede.
Acabo de leer que este viernes será el día de la Luna llena
más grande: “Este viernes inicia la luna llena mas bella del
año, la luna llena de octubre, con su nacimiento resurgiremos con la energía
mas intensa y creadora del
universo.”
No es coincidencia las fases de la luna siempre han
movido mis mareas, así que ahora que es un cambio tan grande, ella también
estará.
Este resurgimiento, este cambio, viene bien
auspiciado. ¡Cómo oráculo se recibe!