jueves, 17 de octubre de 2013

2013 - En luna Llena me cambio




En luna Llena me cambio

No hay plazo que no se cumpla ni fecha que no se llegue, comenzando con esta consabida frase…o lugar común entre los literatos.

El viernes me cambio de casa, después de 20 años de vivir en la actual. Nos despedimos con dignidad, mi casa actual se está renovando para poder recibir a sus nuevos inquilinos, que afortunadamente serán una pareja de amigos muy queridos, qué bueno que ellos la reestrenen, de allí en adelante confío en que los sucesivos sean buenos inquilinos.

Mi casa nueva ya me espera, ahora estoy como partida a la mitad,  todos mis trastos ya están allá, y solo los muebles grandes están aquí. Mi jardín y mis hijas-plantas ya emigraron y me esperan, era vital para mi que se fueran primero, que se adaptaran a su nuevo espacio como seres vivos que son.
El otro día una amiga me dijo -Tu también necesitaras un proceso de adaptación- y es cierto,  aún a lo bueno, uno necesita adaptarse…Creo que a lo malo no te adaptas solo aguantas hasta que dure.

Interesante perspectiva, como te modifica la psique un nuevo comienzo, a razón de la nueva película “Gravity” de Cuarón, ayer escuché que lo mágico de la película es que era una metáfora de cuando el hombre vence los obstáculos y sale adelante… habrá que verla.

Igual cualquier cambio representa una aventura, un reto algo que aprender.

Ayer me quede pensando: Tendré que acostumbrarme a dormir en otro espacio, en otra orientación, a los caminos para llegar a mi nueva casa, a que mi cuerpo pueda moverse en automático como lo hago ahora, entre somnolencias dentro de ella, con o sin luz, al tipo de agua, a la regadera… jaja a todo!

Además de toda la logística y detalles técnicos, que si el Internet, que si el teléfono, que si la lavadora, que esto que lo otro, parte de lo mismo.
Con veinte años menos, la cambiada anterior me hizo los mandados, ahora el cuerpo aguanta menos, se cansa más rápido, aunque aún estamos fuertes y con muchos bríos.

También hay más serenidad en los nuevos proyectos, el entusiasmo vertiginoso de los “treintas” ha sido reemplazado por una ecuánime serenidad y paz, ¡que bueno!
Doña Turbo-cargada (ósea yo) finalmente aprendió a aprecia la calma de los días y la paz.

Como pequeña introducción, hace un par de semanas ya tuve un primer altercado con los vecinos nuevos… aunque no los ví, (la ventaja de ser coto y tener administrador que toree las broncas), que la cerca no les gusto etc. En fin me sirvió par darme cuenta que la humanidad continua igual  donde quiera  que estés y que tratar con personas siempre será algo que aprender y que manejar con cuidado. 

El cambio empieza en mi, aún no los conozco, aún no me conocen, es valida la desconfianza, la inquietud, amigos o solo vecinos, no lo se ahora ni quiero pronosticar ni crear expectativas. Si espero vivir en un clima de armonía y cordialidad ese es el objetivo. Habrá quien solo reciba un saludo, seguramente habrá quien quiera crear una relación cordial o hasta amistosa, ya veremos que sucede.

Acabo de leer que este viernes será el día de la Luna llena más grande: “Este viernes inicia la luna llena mas bella del año, la luna llena de octubre, con su nacimiento resurgiremos con la energía mas intensa y creadora del universo.”

No es coincidencia  las fases de la luna siempre han movido mis mareas, así que ahora que es un cambio tan grande, ella también estará.

Este resurgimiento, este cambio, viene bien auspiciado.  ¡Cómo oráculo se recibe!