jueves, 13 de septiembre de 2012

2012 - Salir en la foto

  
Salir en la foto

Es sábado,  me levanto temprano, quizás algo inusual en sábado, pero hay algo importante que quiero hacer.
Me doy una manita de gato, para salir en la foto literalmente.  Checo que mi blusa sea de un color liso según la única instrucción que recibí, y rápidamente me subo al carro, estudio que ruta es más rápida, ya voy un poco tarde, el parque Agua Azul queda algo lejos de casa, son las 8:10 AM y hay que estar a las 8:30 AM.

Vuelo como alma que lleva el Diablo -le piso- y llego 8:35 AM, me estaciono un par de cuadras lejos, atendiendo a la recomendación y ahora si córrele.

Llego al Agua Azul, se siente aún el sereno de la mañana, lo fresco, volteo a mi alrededor y veo una señora bien arreglada y pienso de seguro ella viene a lo mismo…
Ella también me mira y me pregunta: ¿Vienes a la foto?  Yo digo que sí.
Y entramos al parque, no hay boletera así que nos pasamos.

Haciendo algunos comentarios sobre el evento, y tu de donde lo conoces…. Pues yo de mi trabajo… pues yo, es amigo de mi esposo y seguimos caminando, vamos a la concha acústica y esta en construcción, entonces pensamos vamos a buscar otro lugar. Y vemos varias mujeres de todos colores corriendo y buscando el lugar pactado, todas, absolutamente todas,  portando una sonrisa en la cara, este evento es especial, como él es especial.

Hace como un mes, recibí un correo que me sorprendió, era una invitación a darle un regalo especial a un amigo, se trataba de tomarme una foto con él, así de simple y así de complejo.  No era una foto cualquiera,  en un lugar cualquiera, en un día cualquiera.
Cumplía su 56vo. Aniversario y quería tomarse una foto con 56 mujeres que fueran significativas en su vida.  Al principio me sentí confundida, después me sentí honrada de ser invitada a tan importante ocasión.  Me sonreí, esto era tan típico de él: Sorprenderme, pensar fuera de la caja “thinking out of the box”. Y en esta ocasión era acompañarlo a celebrarlo.
El regalo era solo eso, quizás 20 o 30 minutos de tu tiempo el sábado en la mañana y formar parte de su historia impresa en pixeles o en papel caolín. No pude resistirme, el aprecio era asegurado, pero una inmensa curiosidad también.
¿Sería posible que reuniera a esas 56 mujeres que quisieran tomarse la foto con él?
La duda me carcomía….

Llegamos y allí estaba él, diferente, vestido de traje para la ocasión, raro porque nunca lo vemos con traje, pero esta ocasión bien lo valía. Junto a él Marcela, muy guapa también, vestida para la ocasión y con un corazón ampliamente generoso, para recibirnos a todas.

Era otro foro, que está en el Agua Azul, después supe que se tuvieron que hacer varios arreglos previos para que se pudiera tomar la foto: permisos, ayuntamiento, hablar con los encargados del parque, convencer a la boletera que dejara abierta la puerta (el parque abre a las 10) y asegurar que iban a limpiar el lugar.
 El esfuerzo bien lo valió, el lugar estaba limpio, recién regado, aún se veían algunos charquitos que  aseguraban el esfuerzo por poner el lugar guapo, para recibir a tan atractivo contingente.

Y llegaba una, y llegaban de a dos y llegaba la quinta y así sucesivamente la 20, la 39, ya casi la 40…. Y se empezaba a llenar… si la íbamos a hacer,  parecía algo así como evento de Record Guiness, con cada arribo, una broma, una indicación no se hacia esperar, que córrele, que ya vas tarde etc.


Mientras, algunos fotógrafos aficionados acompañaban a nuestro fotógrafo oficial, que siempre tuvo una sonrisa y toda la paciencia para acomodarnos y hacernos salir bellas en la foto.

Encuentros con amigas que tenía muchos años que no veía, así como algunas que no conocía pero amigas por el hecho de ser mujeres y compartir el cariño por nuestro amigo que celebrábamos.

Y comenzaron las fotos, y éramos 40, … y entonces sucedió lo imprevisto, nos piden sostener algunas cartulinas con los nombres de las ausentes; aquellas mujeres que estaban lejos pero presentes y mas aún algunas en blanco para recordar también a aquellas que se fueron primero, entonces se logró 40 presentes más 15 representadas, ¡55!… la gran incógnita, ¿Faltaba una? Y el factor sorpresa … aparece la 56 siempre presente: Mónica Belluci… su amor eterno.

Éramos 40 físicamente, más el nombre de las ausentes y más las eternamente presentes.
 
Las risas y las preguntas provocativas de él, no se hicieron esperar -Oigan y se les pido que se tomen la foto desnudas ¿Quién participaría? Jajaja las carcajadas… y una aventada dijo -yo sí-  y viene la segunda: Bueno ¿con Body-paint? y varias levantamos la mano y la tercera: Bueno ¿y que tal con bikini? y ahí ya todas estábamos dispuestas a posar.

Aún no sé si la propuesta era en serio…. Pero sin duda fue un reto atreverte a pensarlo.
 
Fotos en grupo, fotos particulares, fotos para el recuerdo. Finalmente la foto estaba tomada, el evento terminando.  Y no quedó ahí, las mañanitas femeninas no se hicieron esperar… y el amigo se emociona y nos agradece y nos vuelve a sorprender.
El regalo fue recíproco, junto con su esposa e hijas prepararon un recuerdo para cada una, ¡Hermoso gesto!

La partida se empezó a dar, algunas tenían que volver, otras entrar al trabajo, algunas más se quedaron a cotorrear un poco, no sin antes pasar por la fila, dar el abrazo y agradecer el hermoso detalle preparado para nosotras.

Partí rápidamente,  le di un abrazo, un beso, y me fui nuevamente portando una sonrisa en mi cara, una sorpresa y muchas preguntas en mi mente.

El Agua Azul me despide fresco, hermoso, simplemente es un sábado diferente, un sábado que valió la pena estar.
Recordé “El que se  mueve no sale en la foto”, aquí había que moverse (de tu rutina) para salir en la foto.

Gracias Hugo por ser y estar aquí.



Días después, le pedí a Hugo que me platicara más sobre el evento He aquí la historia:

¿Como surge la idea?
Una noche tenía insomnio y me levanté, pensé: Ya voy a cumplir 56,  ¿Qué voy a hacer este año para celebrarlo?
Los últimos años, he tratado de hacer algo especial, algo que sea interesante y divertido.
Recordé el Parapente del año pasado, todo lo que me provocó: La sensación más parecida a volar como un pájaro
A mis 50, decidí correr el Maratón de Guadalajara, con todo lo que implicó llegar a la meta, quizás el último, pero no el menos feliz por haberlo logrado, con todo y  el desgarre en el muslo que me hice  pocas semanas antes.
Otros años fueron diferentes retos: que subir el Nevado por la ruta de la Jota, solo, otro año aventarme a recorrer el río en una llantada rumbo al mar, disfrutando la naturaleza en todo su esplendor.
Qué voy a hacer a mis 60, aún no lo sé, pero seguramente será algo divertido.

¿Cuál fue el criterio de selección para tus 56 participantes?
El primer pensamiento fue mis 56 amigos, pero empecé a contar y vi que eran muchos más, así que me decidí por las amigas. Primero pensé quienes pueden asistir, quien tiene más chance, algunas viajan mucho, otras tienen personas a su cuidado, otra es médico y me canceló de última hora, el caso es que mi lista original eran 68 más 15 letreros.
Después me doy cuenta, de que era una verdadera belleza tratar de juntar a todas.
También pensaba, quisiera que no se completaran físicamente para completar con los letreros de las ausentes. Al final todo salió bien reunimos el número esperado y las amigas ausentes también participaron.

Algunas de ellas cuando vieron su nombre en la foto, realmente se emocionaron.

¿Hay algo de ego en este proyecto?
Hugo se ríe, sabe que lo provoco. La inmediata respuesta fue no… pero lo pensó dos veces y corrige, quizás sí, en que sentido me satisface el ego, pues en poder hacer cosas diferentes a lo que la sociedad quiere que hagas.
Para mí es un reto demostrar que la relación entre hombres y mujeres puede ser diferente.

Estuvimos platicando como es difícil en esta sociedad aceptar que la amistad exista entre hombres y mujeres, y que hay hombres que sus únicas amigas son las amistades en común, las esposas de sus amigos.

Hugo me dice, en verdad no creo que muchos hombres puedan hacerlo… reunir 56 amigas mujeres. ¿Tu que crees?

Sonrío, me tengo que ir. Ahora lo entiendo mejor y compruebo porque él sí pudo reunir 56 mujeres.  Hugo ha aprendido a ser sensible, a mostrar su lado femenino sin temor, a ponerse en nuestros zapatos a veces y otras a confrontarte porque haces o dices tal cosa.
Porque no crees en ti.

Hugo Sierra el hombre más feminista que conozco.




 

 

6 comentarios:

Anónimo dijo...

GRACIAS CLAUDIA ! QUE BONITO DETALLE,FUE UN GUSTO ENORME PARA MI VER QUE MI AMIGO DEL CORAZON ES MUY APRECIADO,Y YA ESPERAREMOS QUE SE LE OCURRE PARA LA PROXIMA. UN SALUDO Y UN ABRAZO...MARCELA DE SIERRA

Anónimo dijo...

Hola amigocha, gracias por compartir esto, y felicitame a Hugo por tan hermoso detalle, y una vez más recordarte amiga, que eres muy especial como amiga para muchos de nosotros. Hermila Bedoy.

Anónimo dijo...

Gracias Hugo x invitarme, comparto con claudia sus interrogantes, y su sentir, me gusto su ensayo ! Genial Claudia no conocía esas habilidades tuyas! Hugo nunca dejaras de sorprenderme! Me gusta tu espíritu libre y responsable ,amante de la ecología, del planeta, de la justicia, del ser humano antes del materialismo.

Gracias x compartir el ensayo y las fotos, no habia tenido oportunidad de verlas.
Ana M. García

Anónimo dijo...

QUE BONITO ESCRITO! DE NUEVO FELICIDADES HUGO Y UN ABRAZO A MARCELA Y FAMILIA. ANNA HOLOHLAVSKY

Lourdes Delgado dijo...

sería interesante conocer lo que pasó por las demás cabezas... yo sabía que lo que fuera, era una garantía, algo especial, el homenajeado, su familia, sus amigas... el lugar me trajo viejos gratos recuerdos, (fiestas de octubre etc.) el lugar, (el caminito desde la entrada hasta el lugar de la cita) se me antojó para un cafecito al aire libre....Felicidades Hugo por involucrarnos en tus proyectos, fué un placer.
Lourdes Delgado

Anónimo dijo...

Que linda reseña Clau... y si fui una de las 10-15 que no pudo ir... comparto la sensación de honor por participar en este regalo de cumpleaños!!!!

si esto de la vida es trascender y dejar huella... ¡¡¡¡Hugo has trascendido en mi vida!!!!

Barbara B